Una excelente película de animación japonesa del estudio Studio 4ºC, dirigida por el americano Michael Arias. Podría entrar en la categoría considerada como “anime independiente”, junto a obras maestras como Akira, Mind Game o Paprika. Cuenta la historia de Shiro (Blanco) y Kuro (Negro), dos niños que viven en la zona más desamparada de la ciudad y sobreviven como pueden. Los problemas surgen cuando un grupo mafioso decide apropiarse de dicha zona y convertirla en un sector comercial. Destacan su gran calidad de animación, pese a que el dibujo pueda resultarles algo extraño a los más conservadores, y la relación entre sus personajes, especialmente el contraste entre la salvaje agresividad de Kuro y la soñadora inocencia de Shiro. No dudo en recomendarla, tanto a los seguidores del anime como a quienes gustan de una historia bien contada.
* Escrito por: Pennywise