Siempre me inquietó la idea de poder hacer un intercambio internacional y aunque al principio tenia mucha incertidumbre ante lo que me esperaba, durante mi intercambio he podido comprobar que realmente es una experiencia que todos los estudiantes deberían poder realizar ya que no sólo te aporta a tu crecimiento profesional sino también personal. Cuando fui acreedora de la beca ISEP, dentro de mis opciones estuvieron varios países de Europa y Asia…Finalmente quedé seleccionada para ir a la Universidad de Angers (Angers, Francia). Realmente quedé muy satisfecha por el lugar y la universidad en la que fui asignada, ya que, en primer lugar, Francia siempre me pareció una buena opción ya que es un país central de Europa y puedes viajar a otros países con facilidad, además porque es una oportunidad para practicar un idioma tan importante como lo es el francés. 


En segundo lugar, la universidad de Angers tiene varias facultades y una de esas es la de economía y gestión que es donde me encuentro. En esta facultad ofrecen una amplia variedad de cursos de Master en ingles que tu los puedes tomar siendo estudiante internacional. En tercer lugar, Angers es una ciudad acogedora porque tiene muchos lugares históricos para conocer y muchas actividades en el día y nocturnas que puedes hacer gratis por ser estudiante. Llegué en tren a Angers y de ahí me recibieron unos estudiantes de la oficina internacional y me transportaron a la residencia. La oficina internacional organiza un programa de bienvenida lleno de muchas actividades cada día de la primera semana que te permiten conocer a otros estudiantes de intercambio, así mismo, los de la oficina internacional te guían sobre las primeras cosas que deberías hacer al llegar a la ciudad y te dan una orientación de la metodología de las clases.  Mis primeras impresiones sobre la ciudad fueron muy buenas ya que esta tiene vistas muy hermosas favorecidas por el famoso castillo que se encuentra al lado del lago que atraviesa toda la ciudad, además, al llegar a principios de septiembre, tuve la oportunidad de estar en un festival por toda la ciudad donde habían conciertos y espectáculos gratis. Algunas partes de la ciudad conservan arquitectura antigua, pero hay tiendas y centros comerciales muy modernos.

El sistema de transporte es muy eficaz y da la posibilidad de comprar un tiquete del mes que te sale muy favorable ya que puedes utilizar cualquier medio de transporte (bus, tramway, bicicleta) las veces que quieras durante el día y algo muy bueno es que los buses funcionan toda la noche los fines de semana, lo que te permite salir de fiesta y poder regresar a tu residencia sin ningún inconveniente. Las personas que estudian en la universidad son muy amables y como ven que eres un estudiante internacional tratan siempre de ayudarte con lo que necesites.

En mi residencia universitaria me dieron un cuarto con su respectivo baño, la cocina es compartida por las personas de tu piso y también hay una lavandería donde te cobran por lavada y por secada en total 3,80 euros. La verdad es que los cuartos son muy cómodos y no se necesita de mas espacio, también, muy cerca de la residencia universitaria de Belle Beille (Uno de los campus de la universidad), hay dos supermercados.

El esquema educativo universitario en Angers es diferente al de ICESI ya que hay algunos cursos que se pueden terminar incluso en dos semanas. Aunque yo me estoy quedando en el campus de Belle Beille, estoy viendo clases en St Serge que es el campus donde se encuentra mi facultad. Sin embargo, para ir a clases a ese campus, el bus sólo se demora 20 minutos. Aunque el clima poco a poco es más frio, el cuerpo se va acostumbrando y es cuestión de querer disfrutar y ver el lado bueno de las estaciones que no son tan cálidas. Junto con los compañeros de intercambio salen todos los días planes para conocer la ciudad, ir de fiesta, programar un viaje o simplemente reunirse a hablar. Cerca a Angers esta Nantes y Paris y con anticipación se pueden conseguir tiquetes de bus a estas ciudades a 7 euros. No hay que preocuparse por el idioma ya que poco a poco se entiende cada vez más, eso si, recomiendo que si estas en Francia y todavía no dominas muy bien el idioma busques inscribirte a clases de lengua francesa y a talleres de conversaciones para que aprendas con personas que tienen el francés como su lengua materna. Mientras tanto, no hay de que preocuparse ya que la mayoría del personal de la oficina internacional y de muchas partes de la universidad saben hablar inglés.

La universidad también te ofrece muchas actividades deportivas en las cuales te puedes inscribir sin costo. También, durante el semestre la oficina internacional organiza actividades como por ejemplo excursiones o fiestas para lo estudiantes nuevos. La universidad tiene restaurante y cafetería donde puedes encontrar almuerzos a partir de 3,50 euros.

Irme de intercambio me ha permitido ser mucho mas independiente y organizada con mis cosas, a valorar más mi hogar y mi país. Aunque los primeros días son difíciles poco a poco uno se va adaptando a los nuevos amigos y a la ciudad. Es muy gratificante poder compartir tu cultura con los demás y al mismo tiempo estar aprendiendo de otras, es por esto, que hacer un intercambio se convierte en una experiencia única y un reto que merece la pena realizar.

Gabriela Carmona

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