Nelly Solarte
Con esfuerzo conseguirás lo que quieres.
Noviembre 13 del 2012
Con disciplina y un hábito de estudio se logra un buen rendimiento académico. En la vida universitaria es muy importante tener buenas calificaciones y ser un muy buen alumno; si no es así se cae en prueba académica o se obtiene un acumulado de notas bajas por semestre, lo que no ayuda a la hora de ser un profesional. Este problema con el rendimiento académico lo presentan muchos estudiantes en los semestres de medicina y por más que tratan de mejorar siempre obtienen los mismos resultados hasta terminar desanimándose y pensando que no pueden con la carrera, Si estos estudiantes se proponen una meta, deben tomar aptitudes que lo lleven a alcanzarla; por esto realizamos varias investigaciones para presentar algunas pautas que pueden ayudar a un estudiante con bajo rendimiento a mejorar notablemente, teniendo así una gran satisfacción porque pudo superar los obstáculos que detenían su proceso. Todo se trata de cambiar la manera de pensar y hacer nuevas cosas y obtener nuevos resultados. A continuación se mostraran varios argumentos que muestran por qué tener disciplina y hábitos de estudio es importante para mejorar, y aunque esta mejora requerirá levantarse de cada fracaso seguir estos pasos hará que lleguemos a la meta.
Cuando creamos una rutina de lectura y repaso, logramos buenos hábitos para que nos vaya bien tanto en la clase como en los exámenes. Primero voy a definir que es un hábito para después hablar de cómo se logra con este, adquirir una rutina. Un hábito es adiestrar al cerebro a realizar repetidamente una acción hasta que se vuelva costumbre. Para adquirir un habito es importante saber ¿qué se va a hacer?, ¿cómo se va a hacer? y ¿cuál es la motivación por lo que se hace?, o sea el porque se hará. Teniendo esto claro es importante saber 4 pasos para lograr ese hábito, primero querer el objetivo sinceramente, llenarse de pensamientos y actitudes favorables para lograrlo. “Buscar cuantas ayudas sean necesarias para el desarrollo de ese objetivo y por ultimo llenarse de compromisos públicos o privados que no permitan que no realices tu meta”1. Segundo, no admitir excepciones. Siempre se presentan tentaciones para hacer otras cosas que nos gustan, o personas que nos desaniman a continuar, pero cuando una persona cae en la primera disculpa empieza a caer en otras y otras hasta que siempre tiene una excepción para continuar con su camino hacia el hábito. Por eso siempre que se nos presente la oportunidad de alejarnos de nuestro propósito debemos negarnos y seguir adelante hasta que tengamos éxito con nuestra meta. El tercer punto es que es muy importante tener determinación. Generalmente las personas se acostumbran a dejar todo para después en vez de hacerlo en el preciso momento, y crean el mal hábito de postergar lo que tienen que hacer y peor aún de dejarlo para la ultima hora. Por esto cuando denotamos que tenemos un problema y necesitamos cambiarlo, es necesario actuar inmediatamente. El último punto para conseguir un hábito es esforzarse mucho pero poco a poco, entendiendo que todo es un proceso en el que si todos los días se repite siendo firmes con nosotros mismos lograremos que sea mas sencillo, no quiere decir que será mas fácil sino mas sobrellevable y que con el tiempo nos solucionara el problema. En la universidad Icesi se utiliza el aprendizaje activo, en el cual se exige que debemos preparar el tema de la clase antes de verla, para esto se nos recomiendan diferentes libros dependiendo de la materia, cuando empezamos a leer antes de cada clase será difícil acostumbrarnos a esto; pero si leemos siempre sabremos de que esta hablando el docente, podremos participar y ganaremos las comprobaciones de estudio. Después a la hora de estudiar para el examen ya tendremos bien entendido el tema y no empezaremos apenas a leer y a intentar comprender muchos temas a ultima hora; sólo será un repaso, para tener las ideas frescas de algo que ya sabemos para tenerlo presente y en cuenta a la hora de realizar el examen.
Cuando tenemos organizadas nuestras tareas y nuestro tiempo, podemos dar prioridad a cada una de estas. Cuando hacemos un cronograma detallado de las cosas que nos faltan por hacer a corto y largo plazo, debemos tener la mente abierta y saber que no se puede hacer todo de una, sino que se necesita orden; que todo se logra poco a poco. Para organizar estas tareas debemos tener en cuenta el tiempo del que disponemos, esto dependerá de la carrera que se estudie y del semestre que este cursando. Muchas veces desaprovechamos ese tiempo por pereza, o porque preferimos hacer cosas que nos gustan más y dejamos lo realmente importante a un lado; Si se tiene este problema es importante realizar un horario, repartiendo el tiempo de estudio que se tiene disponible después de las horas de clase; para utilizarlo de una buena manera deberíamos siempre levantarnos temprano. Cuando planeamos el tiempo debemos tener en cuenta cuales son las cosas que debemos cumplir a corto plazo, para darles mas importancia y terminarlas rápido, este cumplimiento requiere concentración completa en lo que se esta realizando, dejando el celular, el computador, la televisión y todo lo que nos pueda desconcentrar a un lado y lejos, para que no nos interrumpa en ningún momento; de eso se trata organizar de acuerdo a la prioridad. Pero también es importante ir adelantando en los tiempitos que sobren las tareas a largo plazo. Otra cosa importante cuando se programa el tiempo, es tener en cuenta las horas de sueño (mínimo 4 horas), cuando dejamos todo para lo ultimo tendemos a no dormir para “aprovechar el tiempo” que nos queda antes de presentar el trabajo o el examen; Cuando dormimos menos del mínimo suceden varias alteraciones en la fisiología normal del cuerpo, primero se corre el riesgo de presentar cardiopatías e infartos porque la falta de sueño altera la presión sanguínea y el colesterol; segundo si no dormimos somos mas propensos a tener estrés, porque al dormir el cuerpo repara elementos dañados celularmente durante todo el día y si no sucede así se liberan muchas hormonas que fatigaran y estresaran a la persona; Si hay alteraciones del sueño despertaremos cansados y sin la energía que el cuerpo necesita para empezar la jornada, por ende no prestaremos la atención necesaria a las actividades del día; por último cuando no se duerme las cosas estudiadas no se procesan de la manera normal en el cerebro para que queden guardadas y después puedan ser recordadas, sino que al momento de necesitarlas no podremos traerlas a la memoria; “No dormir para estudiar más no guarda los conocimientos y aumentan las posibilidades de terminar con problemas al día siguiente”2.
Según las inteligencias múltiples, la disciplina y los hábitos explotan el potencial de cada persona para que sea bueno en lo que hace. Para esto definiré qué es la disciplina; esta última es el conjunto de reglas que se sigue para realizar algo. Según las inteligencias múltiples de Howard cada persona nace con un talento diferente pero este potencial se queda solo en eso si no lo convierten en habilidad por medio de las bases de la disciplina (orden, esfuerzo y constancia). Este conjunto de reglas en general implica trabajo duro y doloroso, pero este “dolor” será temporal mientras que lo que se va logrando será permanente. Por esto la disciplina es una imposición inicial que se convertirá en un beneficio permanente. Cuando hacemos algo con disciplina crearemos un hábito y aprenderemos a fluir muy bien en las cosas que hacemos porque tenemos además potencial para ello. Además de la disciplina es importante analizar y descubrir que tipo de inteligencia tenemos, ya que cada uno nace con un predisposición genética diferente; Howard Gardner nos dice que: “todos tenemos todos los tipos de inteligencias, solo que unas se desarrollan más que las demás y esto depende del ambiente y la genética de cada persona”3. Existen 9 tipos de inteligencias: Lógica matemática, musical, kinestésica, lingüística, intra e interpersonal, naturalista y emocional. De todas las anteriores me parece que cabe resaltar la inteligencia emocional, la cual es cuando las personas pueden dirigir su vida de manera satisfactoria porque tienen control de sus impulsos, agilidad mental, autoconciencia, perseverancia y manejan destrezas que les generan felicidad a largo plazo. De acuerdo esto, me parece importante como estudiantes saber cómo aprendemos y cómo nos expresamos más fácilmente según nuestras necesidades y preferencias; hay estudiantes que si se ponen tristes se les hace casi imposible estudiar, si ellos aprenden a separar y a dar prioridades van a poder sacar fuerza de voluntad para manejar sus emociones y darle tiempo a las cosas que mas importan en el momento.
Hay estudiantes que tienen un buen rendimiento y no estudian ni piensan en tener buenos hábitos, ni disciplina. Pero la mayoría de personas no tienen el mismo potencial ni la misma capacidad y por eso les va mal académicamente. Yo conozco muy pocas personas que sin estudiar les va bien y hasta mejor que muchas personas que estudian, pero esa “suerte” no les dura siempre y cuando menos lo esperan sacan muy baja nota en algo que valía mucho o que necesitaban mucho y ellos mismo admiten que admiran a las personas que estudian y a veces cuando dejan la pereza también se proponen a estudiar y les va excelente. Eso no es lo peor, cuando sean profesionales (si es que se gradúan) en el caso de medicina, llegaran a la clínica y no sabrán que hacer con el paciente y en general en todas las carreras esos “profesionales” no sabrán que hacer en sus oficios y por su negligencia estudiantil terminarán perdiendo sus oficios, porque durante sus carreras perdieron el tiempo y realmente no manejan casi ningún tema.
Para finalizar cuando tenemos buenos hábitos de estudio acordes con nuestro tiempo disponible y trabajamos en ellos con disciplina es inevitable tener un buen rendimiento. Aunque también depende del tipo de inteligencia que tenga la persona, es muy importante que desarrolle ese potencial con orden y esfuerzo porque si no solo quedara siendo talento desaprovechado y que con el tiempo dará malos frutos. Además es necesario que el estudiante conozca sus capacidades y las sepa desarrollar estando comprometido con el cambio para mejorar. Cuando se conozca sabrá si es de las personas que necesita estudiar mas para entender o si de las que entiende rápidamente; debemos tener en cuenta que todos somos diferente y aunque nuestros compañeros estudien poco no debemos dejarnos influenciar por eso, ni desmotivarnos y dejar de estudiar, sino preocuparnos por nosotros mismos y buscar ser excelentes con las herramientas que tengamos a disposición. Algo que nos ayuda mucho para programarnos es realizar un horario donde tengamos todo ordenado de acuerdo a prioridades y a longitud de trabajos, disponiéndonos a estudiar con esfuerzo y disciplina, dejando todo lo que nos pueda interrumpir a un lado; así lograremos el éxito académico visto como el buen rendimiento académico.
Bibliografía:
1CORTESE, Abel (1998), Capítulos 2, 6, 8, 9 en “Las claves del éxito 2”
2SILVA AYCAGUER, Luis Carlos (1993), Capítulo 3 “diseño mi forma de estudiar” en “Ciencias de la Salud”
3Vargas Medina, Juan Manuel (2004). Tipos de inteligencia, México. Disponible en: http://www.ingenieria.unam.mx/~guiaindustrial/entorno/info/6/1.htm