Si tienes pensado instalar pasto en el jardín de tu hogar, como ya sabrás tienes dos opciones, optar por el pasto natural o en su defecto por el pasto artificial, y seguramente que en este caso te estés preguntando ¿Cuál es la mejor opción?, si estamos en lo correcto déjanos decirte que eso depende de algunos factores prácticos como los costos iniciales y continuos, como la cantidad de mantenimiento necesario, o incluso las preferencias personales de estética y/o sostenibilidad.
Además, ten en cuenta que el pasto artificial puede hacer realmente todo lo que el pasto natural puede hacer, e incluso a menudo hasta mejor, y por ende puede hacer muchas cosas que el pasto natural no puede hacer, razón por la cual muchas personas suelen optar por esta opción (pasto artificial) y a lo largo de este post los vamos a comparar.
- Gasto de Agua
Este es claramente el punto más importante para considerar, pues tengamos en cuenta que el pasto natural debe regarse sí o sí día tras día para mantenerse vivo y con ese color verde tan hermoso que lo caracteriza, sin embargo, el pasto artificial o sintético no necesita ser regado para verse en perfecto estado, cosa que es genial porque de esta manera se puede ahorrar en agua.
- Mantenimiento
Tengamos en cuenta que una de las mayores diferencias que existe entre el pasto artificial y el pasto natural es sin duda alguna el nivel de cuidado, ya que el pasto natural requiere claramente de varias horas de trabajo cada semana o incluso cada día para mantener su mejor aspecto, pues este necesita ser regado, podado, aplicarle fertilizantes e insecticidas, entre mucho más.
Mientras que el pasto artificial, solo requiere un mantenimiento mínimo, que es enjuagar el pasto ocasionalmente para así eliminar el polvo, como los posibles olores de los desechos de las mascotas y esto es algo que lo podemos hacer una vez al mes o simplemente cuando queramos.
- Estética
Lo mejor de todo es que las variedades modernas del pasto sintético o artificial son tan pero tan realistas que puede ser difícil distinguirlas de las reales. Además, otra gran diferencia cuando se trata de la estética del pasto es que sintético siempre se ve perfecto, es decir, que este tendrá la misma altura, el mismo color y la misma textura, sin importar la estación, el clima o el desgaste, cosa que es genial.
Esto lamentablemente no se puede decir del pasto natural, ya que las variaciones en la luz como de la humedad, o los problemas estacionales, e incluso de los desafíos de las mascotas y el desgaste general pueden hacer que este aparezca moteado en lugar de verde intenso, o incluso puede ponerse con un color amarillento.
- Inversión inicial
En este caso la inversión inicial del pasto natural es realmente muchísimo más barato que la compra y la instalación completa del pasto sintético, pero, sin embargo, el pasto natural debe regarse a diario, podarse, aplicarle insecticidas, pesticidas, entre otras cosas, lo cual nos hará gastar altas cantidades de dinero a lo largo del año.