Agility, un deporte para conectar con tu perro

Las personas activas no tienen perros menos activos. La mejor manera de maximizar el desarrollo de las habilidades de su amigo peludo, dirigir su energía en la dirección correcta y lograr una comprensión y compenetración total es participar juntos en competiciones. El agility es el deporte más popular para los perros. Requiere buena coordinación, reacción, flexibilidad y, por supuesto, obediencia.

¿Cómo empezó todo?

El agility es un deporte para perros de reciente creación. Se trata de un deporte bastante joven. La primera competición se celebró en el Reino Unido, en Crufts en 1978. La superación de la carrera de obstáculos por parte de los perritos causó un gran deleite entre el público, y desde ese momento las competiciones de agilidad se convirtieron en una parte integral del espectáculo, y luego ganaron popularidad en otros países. 

El creador de agility y organizador de espectáculos John Varley era un ávido fanático de la equitación. Por lo tanto, se cree que fueron las competiciones ecuestres las que se tomaron como base para este deporte en el que los perros son guiados por una pista de obstáculos por un guía que les da órdenes para indicarles en qué orden y cómo deben superarlos. El tiempo en el que se superan, pero también la ausencia de fallos son importantes.

¿Qué es el agility?

El agility es la superación de una carrera de obstáculos por parte de un perro junto con su guía. Este es un deporte de equipo, un perro y su dueño participan en él. El guía debe estar entrenado para dar las indicaciones de forma correcta y comprensible para el perro, de forma que este las entienda y ejecute en el menor tiempo posible.

Lo principal en este deporte es el contacto y la comprensión mutua completa entre una persona y un animal, así como un buen entrenamiento, ya que la limpieza y la velocidad de la ruta dependen de esto.

Las pistas de agility consisten en varios obstáculos que deben completarse en una secuencia determinada. Estos obstáculos vienen en muchas formas:

  • Obstáculos de contacto: aquellos que implican el contacto directo del animal con el obstáculo mismo (generalmente un tobogán, columpio, túnel, etc.)
  • Obstáculos de salto: es decir, aquellos que involucran a un perro saltando (vallas, aro)
  • Otros obstáculos: Esto incluye obstáculos de agility como slalom (palos paralelos dispuestos verticalmente en una fila, durante el paso de los cuales el perro hace una “serpiente” o zig zag) y un cuadrado / podio (plataforma cuadrada cercada o elevada en la que el perro debe congelarse en una pose durante un tiempo determinado).

Los adiestradores experimentados tienen en cuenta las características individuales y de raza de cada perro, así como su las de su guía. Esto les permite lograr buenos resultados y pasar la pista con éxito.

Hay varios concursos de agilidad y certificados que se otorgan tras completar con éxito la pista varias veces seguidas. Estas competiciones tienen sus propios requisitos, clasificaciones y penalizaciones por errores.

¿Cómo comenzar a entrenar?

Si decides que un deporte como el agility es adecuado para ti y tu perro, tanto tú como tu mascota deberéis aprender primero los comandos básicos de la obediencia, como son estarse quieto, sentarse, tumbarse, caminar al lado… Esto te ayudará a hacer contacto con el animal y comenzar la compenetración con él.

Después de completar el curso de entrenamiento inicial, puedes comenzar el entrenamiento de agilidad. Es mejor asistir a clases en una de las escuelas de perros, ya que generalmente tienen lugares especiales para el agility. Las clases en el grupo también te ayudarán a ti y a tu perro a aprender a enfocarse y trabajar en condiciones donde haya muchas distracciones (personas, otros perros, ruido).

Intenta diversificar tus entrenamientos para que la mascota no se aburra y no pierda interés. Recuerda que no puedes regañarlo por un paso incorrecto en el trayecto, y mucho menos golpear o gritar, porque para el perro la agilidad es entretenimiento y una forma de dar rienda suelta a la energía acumulada. Además, lo más probable es que tú no le hayas indicado de forma comprensible lo que deseabas, nuestros perros siempre están deseando agradarnos, por lo que si hizo algo incorrecto es porque no te entendió bien. Por el contrario, es mejor alabar a la mascota con la mayor frecuencia posible cuando hace algo bien. Luego, el perro asociará el entrenamiento con diversión y alegría, y estará feliz de hacer lo que tú le digas.

El agility es un deporte que en principio pueden practicar todos los perros, independientemente de su raza y edad. De igual modo, todo tipo de guías están permitidos, aunque la parte física importante la hace el perro, el guía también va a tener que estar atento y correr en más de una ocasión, pero no hace falta ser un gran deportista para ello. Después de todo, lo principal no es la velocidad y la victoria, sino la conexión entre el perro y el dueño y el placer de pasar tiempo juntos.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*