Desde que inicié la universidad sabía que quería realizar un intercambio universitario a Francia. Mi mayor motivación al escoger Francia era poder mejorar mi francés y conocer un poco más de esta cultura. Adicionalmente lo vi como una oportunidad de mejorar mi carrera profesional, conocer nuevos países y convivir con nuevas culturas. Pienso que por el enfoque que tienen mis dos carreras era necesario hacer un intercambio, para poder entender que es lo que está pasando alrededor del mundo y no solo polarizarse por la realidad y el pensamiento colombiano.

Al principio sabía que iba a ser difícil porque no tienes las comodidades a las que estás acostumbrado en Cali, pero igual era un reto por él que quería pasar en esta etapa de mi vida. Esta es una oportunidad para aprender a valerse por sí mismo y valorar hasta lo más mínimo.

La primera semana me quedé en la casa de una caleña mientras encontraba un lugar donde quedarme durante todo el intercambio. Al principio fue difícil encontrar casa ya que buscaba un lugar barato y cerca al centro pero que fuera amplio y acogedor. Sin embargo, debes saber cuál es tu prioridad antes de escoger un lugar, en mi caso, prefería tener un lugar más barato y un poco más lejos del centro. Normalmente, se encuentran lugares baratos, pero de un solo cuarto con una sola cama y un sofá cama (yo iba a compartir apartamento con una amiga). Los alquileres pueden estar desde 600€ hasta 1000€, lo ideal es poder compartir con otra persona para poder dividir la tarifa. Entre mi amiga y yo pagamos 630€ cada mes, esto nos ayuda a ahorrar un poco más de dinero para poder viajar. En cuanto al transporte lo encuentro muy eficaz y puedes llegar a cualquier parte sin problema, el único inconveniente que he encontrado es que el bus que pasa por mi casa es hasta las 8:30, sin embargo, puedo caminar 15 minutos hasta el tram que funciona hasta más tarde.

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En la universidad he conocido a personas de todas partes del mundo, sin embargo, no he conocido muchos franceses. En la universidad todas las clases son en inglés para los estudiantes internacionales y además te dan una clase de solo francés que es donde he podido practicar más que todo el idioma. En cuanto a la ciudad, venía con unas expectativas muy altas sobre ella porque pensaba que era más grande, pero de todas maneras los lugares que hay por conocer son muy bonitos, el centro de la ciudad está lleno de callejones los cuales no terminan de sorprenderme. El hecho de que sea una ciudad pequeña me ha permitido poder establecer relaciones más estrechas con todos los estudiantes de intercambio y tener un círculo social bastante amplio.

Hay que aprovechar también esta oportunidad para poder viajar y conocer lo que más se pueda, se pueden encontrar tiquetes muy baratos de bus, tren y avión. Además, son muchos los países que están cerca y ciudades espectaculares dentro de Francia que uno no puede dejar de visitar. Esta es una experiencia que le recomiendo a todo el mundo, es un gran esfuerzo que los papás tienen que hacer, pero de verdad que cada peso lo vale. Estoy segura que a muchos les quedará haciendo falta tiempo para seguir conociendo y disfrutando.