Mi experiencia en Alemania comenzó el 3 de febrero del 2017. Después de haber investigado un poco acerca de Mannheim, la ciudad que escogí como destino de mi intercambio académico, emprendí mi viaje con mucha seguridad que este semestre sería muy importante en mi vida. Escogí Alemania porque, primero, quería ir a un país de Europa, con el propósito de conocer este continente, y segundo, entre las posibles opciones de convenio que la Universidad Icesi tiene con mi carrera, Economia y negocios internacionales, este país me resultó muy interesante debido a la organización y el desarrollo económico e industrial que lo caracterizan y porque quería ir a un lugar donde pudiera aprender un poco de otro idioma y vivir una cultura diferente.
Dentro de Alemania, tenía cinco opciones para escoger, pero tres de estas universidades estaban situadas en ciudades muy grandes, lo cual se traduce en mayores costos y mas estrés. Al revisar la facultad de negocios de la Universidad de Mannheim, vi que estaba posicionada a nivel nacional como una de las mejores, y al investigar un poco acerca de la ciudad, ví que cumplía todo mis requisitos en cuanto a ubicación y accesibilidad, suroeste de Alemania, trescientos mil habitantes, cerca de tres aeropuertos internacionales y a solo una hora de distancia de dos metrópolis, Frankfurt y Stuttgart, además de ser la segunda ciudad menos fría del país. Entonces me decidí por ella y viajé sin mucho temor, pues ya había tenido la oportunidad de irme de intercambio al graduarme del colegio, así que no era algo nuevo para mí.
Después de casi un día entero viajando, llegué a la ciudad y me recibió un familiar de un amigo, que vive en Mannheim, y quien me alquiló un cuarto por el primer mes hasta que conseguí un lugar permanente donde vivir, lo cual no fue fácil, ya que es una ciudad universitaria y hay mucha demanda de apartamentos y residencias universitarias.
La primera semana en la universidad, fue de inducción, y fue muy útil, ya que nos explicaron mucho acerca del funcionamiento del sistema educativo alemán y algo de su cultura, además de que conocí muchas personas de todas partes del mundo. En cuanto al sistema, es muy diferente al de Icesi, ya que solo te hacen un examen al final del curso y que vale por el cien porciento de la materia, además otra cosa que me llamó la atención y me gustó mucho, es que hay posibilidad de ver seminarios intensivos, que son clases intensivas que se dictan muy rápidamente, en un par de semanas o incluso un par de sesiones, que traen profesores internacionales y son de temas muy interesantes.
Lo que más aprecio de este país es la organización y la puntualidad, incluso en el ámbito del transporte público, que como bien estamos acostumbrados en Colombia, es muy deficiente. Además algo que me parece sumamente importante es el nivel educativo de las personas, pues incluso personas del común como conductores o vendedores hablan varios idiomas y demuestran mucha educación y cultura, pues en ese país todos tienen derecho a educación casi que gratuita y de buena calidad. Acá, por ejemplo tengo varios amigos extranjeros que han venido a realizar su postgrado y que tienen tan solo veintidós o menos años de edad, pues es muy fácil tener un trabajo de medio tiempo que te da los suficientes recursos para costear tus gastos universitarios, además de algunas ayudas que el estado provee.
Finalmente lo que más he disfrutado de mi estadía es la seguridad con la que se vive y facilidad con la que se puede viajar en Europa a un bajo costo, pues en cuestión de un par de horas en bús ya estás en otro país, donde se habla otro idioma y con una historia igual o más fascinante que el país vecino. Hasta ahora he tenido la oportunidad de conocer más de seis paises y espero poder visitar unos cuantos mas en lo que me queda de mi semestre universitario.
