Toda mi vida soñé con irme de intercambio, en el colegio nunca lo realice, pero ahora tuve la oportunidad y las ganas de realizarlo. Desde que ingrese a la universidad, me interese por los convenios que esta tenia, mi hermano se graduó de ICESI e hizo un intercambio a Barcelona, entonces desde el primer momento que yo entre me dijo “ Andre, tienes que hacerlo”.

En primer lugar, deseaba irme a Londres, pero lastimosamente la universidad no presentaba un convenio bilateral, empecé a hablar con mis amigos que ya habían realizado intercambios y me recomendaron hacer la doble titulación en Francia. Me preguntaba Francia? Y yo como me voy a ir a Francia, si no se hablar francés? ( solo hice un nivel de francés en la universidad) Lo mas interesante de todo es que no es fundamental para poder estudiar aquí, porque todas las clases son en ingles. Empecé a investigar acerca de las universidades, y mi primera opción era Montpellier y la segunda Clermont, ese semestre nos presentamos muchos estudiantes entonces finalmente quede en ESC Clermont.

Era la primera vez que salía de mi casa por tanto tiempo, tenia muchos miedos acumulados, de dejar a mi familia,a mis amigos y generalmente de salir de mi zona de confort, de esa “ burbuja” en la que todos vivimos. Además, estaba asustada por la cultura y el idioma, pero ahora me doy cuenta que fue la mejor decisión que pude haber tomado en mi vida. Afortunadamente, una amiga de la universidad aplico conmigo, esto me tenía un poco mas tranquila, porque no iba a enfrentarme a estos retos sola, y sabia que siempre iba a tener un apoyo incondicional.

Al principio, tuvimos muchos problemas con la estadía, la llegada fue un poco complicada porque veníamos con muchas maletas, llegamos a Orly y debíamos coger un tren hacía Clermont, aquí tuvimos una experiencia muy chistosa, puesto que, no encontrábamos la estación de trenes “ Bercy” , tratamos de comunicarnos con las personas, pero NADIE hablaba ingles, una señora de edad intento ayudarnos pero no logramos entenderle, terminamos las tres riéndonos hasta no poder mas, finalmente por medio de señas pudimos comprender hacia donde debíamos ir.

Clermont es una ciudad hermosa, estudiantil, y con una cultura extremadamente francesa, es el lugar perfecto para aprender francés, puesto que, muy pocas personas hablan ingles o español, así a uno le toca hacer el esfuerzo para tratar de comunicarse y expresarse. Estoy viviendo en un lugar increíble, la calle se llama “ Rue Saint Dominique”, es cerca a Place de Jaude, a los supermercados y me demoro 10 minutos caminando a la universidad. Además, en la calle viven aproximadamente 4 Barranquilleros, 1 Peruana y varios Colombianos, esto hace que todos estemos unidos y nos sintamos en familia.

La universidad es totalmente diferente a ICESI, te sientes en un mundo diferente, donde puedes compartir con culturas de todo el mundo ( Chinos, Franceses, Italianos, Mexicanos, Peruanos), esto hace que te exijas cada vez mas, porque todos no tienen el mismo nivel de ingles y es hay veces un poco difícil comprender el mensaje que te desean enviar. El campus es muy pequeño, no tiene muchas zonas verdes y aparte los horarios cambian todas las semanas, entonces es un poco complicado.

Esta experiencia ha sido muy enriquecedora para mi vida profesional y también personal, me he vuelto una persona mas independiente, y he aprendido a apreciar mas todo lo que mis padres me pueden brindar. Es difícil empezar a vivir solo y a experimentar todo lo que uno nunca ha hecho, porque normalmente estamos acostumbrados a que nos hagan todo! Aquí, debo cocinar, lavar, tener la casa limpia, hacer mercado y otras tareas de las cuales no estaba acostumbrada, pero esto me ayuda a crecer y a entender que somos unas personas privilegiadas por todo lo que tenemos.

He tenido la oportunidad de viajar mucho, y a un precio increíble, el único problema es que desde Clermont todos los tiquetes salen mas caros, entonces toca desplazarse a Lyon o a Paris para conseguirlos mas económicos.  He visitado Lyon, Niza, Cannes, Mónaco, Roma, Florencia ( varias ciudades de Italia), Toulouse y otras ciudades que me han enriquecido en el aspecto cultural y he aprendido acerca de la historia de cada uno. La cultura francesa es un poco diferente a la nuestra, las personas no son igual de amorosas, sociables y amables pero con el tiempo uno va aprendiendo de ellos.