Boletín de prensa #198 Entidades municipales convocaron a los caleños a economizar agua, dado el bajo caudal de los ríos de la ciudad. Gloría Guevara, docente de la Facultad de Ciencias Naturales, analiza la problemática y proporciona algunos consejos para ahorrar este preciado líquido. AGUA-DE-LA-LLAVE En Cali, se tiene la cultura de ‘echarle la culpa a otro’ de todos los problemas ambientales, pero no nos damos cuenta que también somos parte del problema y parte de la solución. Desde esta mirada, es importante crear y/o fortalecer las cadenas de educación ambiental a todo nivel, ya que esta problemática, no solo debe dejarse en manos de las entidades gubernamentales o encargadas del cuidado del medio ambiente, sino que los mismos ciudadanos, debemos ser conscientes de nuestra responsabilidad como consumidores, causantes de las dificultades que se presentan en él ecosistema en que vivimos. Teniendo en cuenta las fuertes temperaturas que se presentan en nuestra ciudad en las últimas semanas, las olas de calor, incrementara en los ciudadanos el gasto del precioso líquido, desde allí lo importante de llamar a la prudencia y cuidado de este recurso, a ser comprensivos durante los cortes de agua y a estar preparados de la mejor manera durante esta temporada. En épocas de verano, los niveles del río bajan lo que dificulta a las plantas la captación y purificación del agua. Todos estos factores deben ser tenidos en cuenta a la hora de usar nuestro servicio ambiental más importante, por esta razón la invitación a ser prudentes en su manejo.
Claves para ahorrar agua 1. Bañarnos en un tiempo corto y con ducha  que de caída en forma de regadera 2. Usar la lavadora con cargas completas, utilizando detergentes ecológicos 3. Cerrar la llave durante el tiempo en que se enjabonen los platos, la ropa y se cepillen los dientes 4. No lavar autos y ante jardines con manguera o  excediendo el uso del jabón que a su vez aumenta el uso del agua 5. Almacenar el agua para consumo humano con una buena tapa en lugar fresco y alejado de insectos y roedores 6. Estar pendiente durante las jornadas de corte o racionamiento del líquido para evitar el almacenamiento innecesario o que pueda ser desperdiciado 7. En las zonas susceptibles a incendios tener cerca los  datos números de las entidades de riesgo de desastres, los planes de emergencia  y contingencia (PLEC) o el de la entidad que cumpla este papel con el objetivo de dar la alarma a tiempo.
Estas son algunas de las ayudas que podemos brindar como ciudadanos al medio ambiente, a las entidades gubernamentales y en especial a nuestro bolsillo, pues no debemos dejar de lado que el gasto excesivo del agua nos puede acarrear un aumento en el valor de los servicios públicos y la prioridad  de consumo de agua debe ser  para beber y así evitar la deshidratación y choques de calor que pueden acarrear problemas de salud.