¿Será este un giro acertado?

Por: María José Galeano

Las últimas elecciones presidenciales en varios países latinoamericanos han dado como resultado un giro hacia la izquierda en la región, lo cual ha despertado una diversidad de reacciones entre sus habitantes. Desde luego, esto ha sido para el agrado de muchos, ya que lo han concebido como una respuesta a las crisis de legitimidad que atravesaban los gobiernos, y a las coyunturas sociales y económicas que ha enfrentado el mundo en los últimos años. Sin embargo, estos cambios también han generado rechazo de parte de la población, pues se cree que posiblemente esto lleve al detrimento de las naciones.

Ahora bien, días antes de emprender nuestro viaje hacia el Cono Sur se celebró la segunda vuelta de la elección presidencial en Colombia que resultó en la victoria de Gustavo Petro, un economista que ha abanderado la fuerza política en oposición a los partidos tradicionales. Evidentemente, su campaña electoral fue muy polémica, polarizada y estuvo rodeada de muchos mitos, así como su triunfo, pues hubo divergencia en las reacciones de los colombianos. Por supuesto, el viaje que se aproximaba nos iba a revelar cuál había sido la reacción de la elección de Petro en países donde se ha dado un giro hacia la izquierda: en Chile con Gabriel Boric y en Argentina con Alberto Fernández.

Por un lado, desde el primer día en Santiago de Chile pude rescatar algunas similitudes con Cali en cuanto a su posición como epicentros de grandes estallidos sociales, donde la población manifestó el escaso sentimiento de representación política, la baja credibilidad en las instituciones y el cuestionamiento de las agendas de gobierno. Esto fue confirmado por el profesor Luis Oliva, quien nos acompañó en una caminata y nos contó cómo la ciudad enfrentó esta situación y la manera en la que se está recuperando, pues la infraestructura y el tejido social quedó bastante afectado. Asimismo, la primera opinión que escuché sobre la victoria de Petro fue negativa, ya que esta persona concebía que su elección no fue acertada y que, probablemente, nos llevaría a un deterioro similar al que, bajo su perspectiva, está Chile.

Igualmente, en nuestra visita a la Universidad Católica de Chile tuvimos la oportunidad de discutir los retos y oportunidades políticas relacionadas con el impacto del estallido social y la nueva Constitución chilena, la cual tiene dividida y en incertidumbre a gran parte de la ciudadanía. Sin duda, se evidencia una gran preocupación por el futuro del país.

Por otro lado, la llegada a Buenos Aires traía muchas expectativas, pues bastante se habla sobre la coyuntura económica que están enfrentando y, desde luego, quería conocer de primera mano que estaba ocurriendo y saber la opinión que tenían los argentinos de su propio gobierno y el manejo de esta situación. Me pareció interesante que cada vez que tuve la oportunidad de conversar con un argentino de a pie y le comentaba que era de Colombia, lo primero que hacían era preguntarme acerca del cambio con Petro. Para muchos era insólito, puesto que no entendían cómo elegíamos a alguien de izquierda viendo los resultados negativos que han tenido en su nación.

Es evidente que, al igual que en Chile, se está viviendo un ambiente altamente polarizado, en el que el tema político impera en todas las conversaciones. Sin embargo, me pareció curioso que al trasladarme al ámbito académico la percepción cambió un poco. Por ejemplo, en la cena que tuvimos con profesores y estudiantes de la Universidad Católica Argentina estaban interesados en saber cómo estábamos enfrentando este cambio en Colombia y cuáles eran las opiniones de las personas. Además, les llamó la atención saber sobre la nueva vicepresidenta, Francia Márquez. De igual manera, ocurrió en el Congreso WISC en un conversatorio sobre Violencia Política en América Latina, donde una de las ponentes le interesó nuestra impresión sobre este cambio y lo que podría significar para la resolución de conflictos en varias regiones del país.

Otra visita que me ilustró un poco acerca de este tema fue en el Think Tank de Transparencia Electoral, pues este estuvo presente en el proceso de veeduría internacional de las elecciones presidenciales, y aquí debatimos un poco sobre la confianza en las instituciones y lo que significó la victoria de Petro para los colombianos.

Por último, la visita a la Embajada colombiana nos regresó y acercó un poco a casa, ya que logramos conocer cómo funcionaba el Ministerio de Relaciones Exteriores y nos comentaron cómo se daría el empalme con el nuevo gobierno.

Sin duda alguna, el Study Tour Chile/Argentina me permitió comparar la realidad política y social de mi país con la de otras naciones de la región, descubriendo así que todos estamos enfrentando momentos de agitación política, social y económica, pero en las que las poblaciones están esperando mejoras y bienestar para toda la sociedad. Desde luego, me hicieron reflexionar si los colombianos tomamos una decisión acertada, pues aún existe mucho miedo e incertidumbre, pero todas las visitas me demostraron que, si bien compartimos algunas similitudes, somos países con historias, culturas y conflictos diferentes.

Gracias a todos mis compañeros que vivieron esta increíble experiencia junto a mí, a la Universidad ICESI, a los profesores Vladimir Rouvinski y Juan Pablo Milanese, y a todas las personas que permitieron que este viaje fuese realizado.